CIUDAD DE GUATEMALA (AP) — El Ministerio de Gobernación de Guatemala confirmó la madrugada del lunes la detención de uno de los 20 reos miembros de la pandilla Barrio 18 que se evadieron de prisión y que las autoridades descubrieron tras hacer un recuento en los registros.

Se trata de Byron Eduardo Fajardo Revolorio, alias Black Demon, quien fue detenido la madrugada del lunes en el departamento de Santa Rosa, al este del país, junto a familiares.

El domingo la dirección del Sistema Penitenciario confirmó que tras una requisa en la prisión se detectó que faltaban 20 reos.

En septiembre el gobierno de Estados Unidos declaró a Barrio 18 una organización terrorista por generar violencia e inseguridad que alcanza a sus territorios. En un comunicado la embajada estadounidense en el país dijo que era “totalmente inaceptable” la fuga y urgió a la pronta recaptura de los presos.

El ministro de Gobernación, Francisco Jiménez, confirmó a The Associated Press que destituyó al director del Sistema Penitenciario, Ludin Godínez, y al director de la prisión. También se presentaron denuncias para establecer a los responsables.

En conferencia de prensa, Jiménez agregó que en total fueron nueve los funcionarios destituidos, entre ellos cuatro directores y subdirectores de las prisiones Fraijanes II, Mariscal Zavala, Izabal y la de máxima seguridad Renovación I.

Jiménez recordó que tras ser declarada organización terrorista por parte de Estados Unidos, toda persona que colabore con los pandilleros será denunciada. Jiménez anunció recompensas de hasta casi 20.000 dólares por quienes den información de cada uno de los reos evadidos para su posterior captura.

Godínez dijo la víspera que los pandilleros que se escaparon de la cárcel de Fraijanes II estaban detenidos, la mayoría condenados, por diversos delitos, incluidos extorsión y asesinato, y que reconocía “la gravedad de este hecho”.

De lo que se conoce de la fuga hasta ahora es que se trató de evasiones de uno en uno e incluso de dos en dos a lo largo de varios días, las cuales podrían haberse efectuado durante la visita de familiares a esa cárcel, dijo Godínez el domingo.

Las autoridades habrían descubierto las evasiones varios días después luego de realizar un operativo para hacer el recuento de detenidos. Indicaron que investigan la posible complicidad de varios guardias del Sistema Penitenciario.

La semana pasada el gobierno guatemalteco le pidió al Congreso modificar las leyes para combatir a las pandillas, así como la creación de una ley que permita la construcción de una prisión de máxima seguridad para pandilleros que incluiría mayores controles en las visitas, registros de voz y aislamientos, entre otras medidas de seguridad.

En julio de 2024 el Ministerio de Gobernación trasladó a 10 líderes de las dos pandillas Barrio 18 y Mara Salvatrucha, las más grandes de Guatemala, a una cárcel de máxima seguridad, donde los dejó bajo aislamiento, sin privilegios y vigilados las 24 horas.

El traslado se debió a una masacre cometida en una funeraria en la que amigos y familiares velaban a un presunto pandillero de Barrio 18. Se presume que dicha masacre fue efectuada por la Mara Salvatrucha.

Tras el traslado los pandilleros se amotinaron cuatro veces. A consecuencia de ello, un guardia murió y varios de ellos fueron retenidos, aunque posteriormente se los liberó.