El otoño ha entrado de lleno en la mayoría de viviendas de nuestro país y es hora de que también se adentre en nuestras cocinas. Y qué mejor para darle la bienvenida a esta estación que con el fruto seco por excelencia de la temporada, la castaña. A menudo asociamos su consumo a paseos invernales, ya sea entre árboles de hoja caduca o con las últimas compras de las navidades. Sin duda, no hay nada como comerlas asadas, recién hechas y resguardadas del frío en un cucurucho de papel de periódico. Pero no solo puedes prepararlas así en casa, también podrás preparar platos fáciles con este manjar. Es por ello que te presentamos cinco recetas deliciosas con castañas.

La castaña apenas lleva un mes en temporada y seguirá en estación hasta finales de noviembre o diciembre. Te aconsejamos que las adquieras en tu comercio de alimentación local de confianza o en el mercado, para aumentar tus posibilidades de adquirir castañas autóctonas. Presta atención al etiquetado para asegurarte de que son de procedencia nacional.

Risotto de setas y castañas

Puedes utilizar cualquier arroz de grano corto en sustitución del arbóreo

¿Qué puede pasar si a una receta de temporada le añadimos uno de los ingredientes otoñales por excelencia? Que tenemos un risotto de setas y castañas. Se trata de un plato cremoso, suave y delicioso, que con la adición de la castaña adquiere toda una nueva gama de matices. Todos los ingredientes de esta receta son de temporada, por lo que solo tendrás que dirigirte a tu mercado semanal local para hacer acopio de todo lo que necesitas. Verás que entre la lista de elementos que necesitas para esta receta está el arroz arborio, una variedad de arroz de grano corto procedente de Italia. Puedes sustituirlo con variedades autóctonas con una anatomía similar, como el arroz bomba:

  • Media cebolleta picada
  • Media taza de arroz arborio o similar
  • 20 gramos de boletus deshidratados
  • Dos castañas cocidas y peladas
  • 30 mililitros de vino blanco
  • 20 mililitros de nata líquida para cocinar
  • 30 gramos de queso pecorino: se trata de un queso potente y salado, con un toque picante al final. Si no consigues hacerte con él en un comercio especializado, puedes sustituirlo por otro queso graso y fuerte
  • Dos o tres tazas o 400 mililitros de caldo de verduras: puedes adquirirlo en el supermercado, aunque, por la calidad del resto de ingredientes, recomendamos que lo prepares tú mismo si tienes tiempo. Para ello, cuece a fuego medio durante media hora una cebolla, un puerro, una rama de apio, una cabeza de ajo, dos ramas de tomillo y otras dos de romero en un litro de agua.

Para preparar el risotto de setas y castañas debes picar y pochar la cebolleta en una cacerola honda, la misma que vas a emplear para cocinar el risotto. Cuando coja color, añade el arroz y saltéalo hasta que quede nacarado. A continuación añade las castañas cocidas, peladas y troceadas y los boletus laminados, y después el vino para desgrasar. Deja que el vino evapore un poco mientras remueves todos los ingredientes.

Posteriormente llegará el momento de añadir el caldo con la técnica clásica de preparación del risotto: debes añadir el líquido poco a poco, y no añadir más hasta que quede absorbido el que ya está en la cacerola. Una vez el arroz esté cocinado añade la nata. Por último, apaga el fuego y añade el queso, removiendo bien.

Crema de castañas y cacao

Las castañas son un sustitutivo económico a la avellana

Es muy probable que, la llames como la llames, tengas un tarro de crema de avellanas en casa. Si alguna vez has querido prepararla casera, habrás visto que en la actualidad el precio de las avellanas ha subido, pero debes saber que es posible prepararla casera y con un sustitutivo mucho más económico. La crema de castañas y cacao tiene un sabor más dulce y da más protagonismo al chocolate, pero sin duda no te dejará indiferente. Para prepararla, necesitarás los siguientes ingredientes para un tarro de 300 gramos:

  • 300 gramos de castañas peladas y cocidas
  • 400 mililitros de leche
  • 50 gramos de cacao puro en polvo
  • Una cucharadita de canela
  • 40 gramos de sirope de agave

La elaboración de este untable es extremadamente sencilla. En primer lugar, deberás cocer las castañas en un cazo junto con la leche, el cacao, el sirope de agave y la canela durante 20 minutos. Después, tritura bien hasta que consigas una crema con una textura fina. Puedes colarla si es necesario y ajustar la textura final añadiendo más o menos leche.

Bizcocho de castañas

Se trata de un postre perfecto para acompañar con un buen café

Si quieres seguir explorando qué clase de postres pueden prepararse con las castañas, un bizcocho clásico es tu mejor opción. Se trata de un dulce de sabor ligero y con una textura esponjosa, perfecto para acompañar a un café fuerte. Con el fin de preparar este postre necesitarás los siguientes ingredientes:

  • 170 gramos de castañas cocidas
  • 350 mililitros de leche entera
  • Cuatro huevos de tamaño mediano
  • 160 gramos de azúcar blanco
  • 50 gramos de aceite de girasol
  • 100 gramos de harina de trigo
  • 4 gramos de levadura química
  • Un molde de horno alargado de unos 20x10 centímetros

Como la mayoría de los bizcochos, su elaboración es muy sencilla y a prueba de cualquier cocinillas principiante. Sí que debes tener en cuenta que, como cualquier receta de repostería, debes ser disciplinado con las cantidades de los ingredientes estipuladas. Mientras que la cocina, por lo general, es más flexible y da pie a la experimentación, el arte de preparar postres es toda una ciencia.

El primer paso de esta receta es ablandar las castañas cocidas, sumergiéndolas en la leche en un cazo y dejándolas cocinar a fuego medio durante diez minutos o hasta que estén blandas. Después, tritura la mezcla hasta obtener un puré fino, resérvalo hasta que quede a temperatura ambiente, de lo contrario corres el riesgo de cortar el resto de ingredientes. Forra el molde de bizcocho con papel de horno y precalienta el horno a 180 grados.

Mientras, bate los huevos y el azúcar en un bol, hasta que doblen de tamaño y obtengan una tonalidad clara. Después, intégrales el aceite de girasol. Tamiza la harina y la levadura química sobre el bol y mézclalo todo con movimientos envolventes. Añade el puré de castañas y remueve con cuidado. Vierte la mezcla en el molde y cuece durante unos 40 minutos.

Jarrete de cordero asado con castañas

Se trata de una receta perfecta para ocasiones especiales

Si buscas guardar una receta para el periodo navideño u otra ocasión especial, no hay nada como un jarrete de cordero asado con castañas. El jarrete es la parte inferior de la pata, que va desde la corva hasta el pie. Aunque por lo general las costillas de cordero son más populares, este corte de carne es rica en tendones y colágeno, que tras una buena cocción se convierten en una gelatina perfecta para el asado. Las castañas, por su parte, le aportan un contrapunto dulce. Para preparar esta receta necesitas los siguientes ingredientes:

  • Ocho jarretes de cordero
  • Castañas en almíbar
  • 60 gramos de bacon: recomendamos que lo adquieras en tu carnicería de confianza
  • Una cebolla
  • Tres patatas
  • 500 mililitros de caldo de carne
  • 100 gramos de setas
  • Hilo de cocina

En primer lugar, tendrás que saltear en la sartén las setas y el bacon. Después, abre el jarrete, rellénalo con la mezcla y ciérralo con la ayuda de un hilo de cocina. Corta las patatas y la cebolla y distribúyelos en el fondo de una bandeja de horno, a modo de cama para los jarretes. Añade un chorrito de aceite de oliva y medio vaso de caldo de carne y coloca los jarretes sobre las patatas. Hornea durante una hora y media a 180 °C, dando la vuelta a las piezas cada 15 o 20 minutos para que se cocine de forma uniforme.

Crema de castañas

La crema de castañas admite que le introduzcas todo tipo de verduras que sobren en tu nevera

Si buscas una crema como plato principal, no hay nada mejor que una crema de castañas. Contundente, pero de sabor suave, es perfecta para preparar con todas las verduras que tengas en casa. Recomendamos que poches un huevo para coronar esta receta, para la que necesitarás los siguientes ingredientes:

  • 200 gramos de castañas asadas y peladas
  • Una cebolleta
  • Un puerro
  • Una patata grande, pelada y troceada
  • 400 mililitros de caldo de verduras
  • 15 gramos de mantequilla
  • Tomillo seco o fresco al gusto
  • Dos cucharadas de nata líquida
  • Aceite de oliva virgen extra
  • Pimienta negra molida
  • Sal
  • Huevo (opcional)

Arranca esta receta calentando la mantequilla en una cazuela, en la que pocharás las verduras —la cebolleta y el puerro— con una pizca de sal. Cuando transparenten, añade las castañas, el tomillo y la patata y rehoga un poco todos los ingredientes. Después, cúbrelo todo con caldo y lleva a ebullición. Tapa la cazuela y deja que se cuezan los ingredientes durante media hora, removiendo de ver en cuando. Por último, añade la nata y tritura muy bien toda la mezcla.