Un elevado de rutina se transformó en una jugada defensiva que dejó perplejos a jugadores y aficionados durante el partido entre los Dodgers y Milwaukee. El jardinero de Milwaukee, Sal Frelick, fue el protagonista involuntario de un doble play de final de entrada, comparable a las mejores jugadas de postemporada.

El caos se desató en la cuarta entrada, con las bases llenas y un out, tras un batazo de Max Muncy. Frelick saltó de forma espectacular contra la barda intentando robar lo que parecía un posible grand slam. Sin embargo, la pelota "rebotó en el borde de su guante, golpeó la parte superior de la valla y luego cayó de vuelta en sus manos", según confirmó la transmisión oficial.

Caos y Ejecución Defensiva

La inusual trayectoria del balón desorientó a los corredores de Los Ángeles,

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