Los reencuentros en Israel estuvieron cargados de lágrimas, abrazos y alivio, pero también de un shock emocional profundo: los 20 rehenes israelíes liberados por Hamas en Gaza volvieron a ver la luz del sol por primera vez en más de dos años. Para muchos, el regreso a la libertad significó reencontrarse con el propio cuerpo y con la sensación de decidir por sí mismos.
Soledad extrema y pérdida de peso
Uno de los casos más dramáticos es el de Avinatan Or, quien pasó 738 días completamente solo en una celda subterránea en Gaza. Durante el cautiverio perdió entre 30% y 40% de su peso corporal, según los primeros informes médicos. Fue secuestrado durante el Festival Nova, donde vio cómo su novia, Noa Argamani, era llevada por los terroristas. Ambos se reencontraron recién tras su liberación.