El objetivo principal de la medida es optimizar la eficiencia en el uso de la infraestructura aeroportuaria, garantizando la seguridad operacional y la continuidad de las operaciones aéreas, en beneficio de la mayor cantidad posible de usuarios.

De acuerdo con el documento, las administradoras aeroportuarias deberán asignar los horarios de aterrizaje y despegue únicamente a las personas transportistas aéreas que los soliciten en cada temporada, considerando las recomendaciones del Comité de Operación y Horarios, los reportes de la persona coordinadora de horarios, y las determinaciones del subcomité de demoras.

Asimismo, la asignación deberá realizarse por hora, conforme a la capacidad operativa declarada tanto en pistas como en edificios terminales. En ningún caso la cantidad de horario

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