“Fue un trabajo difícil que requirió del esfuerzo conjunto de varios órganos de seguridad y el apoyo del gobierno; del manejo de estrategias eficientes para prevenir males mayores y evitar el alzamiento de quienes pretendían imponer un nuevo liderazgo negativo o continuar con el anterior; y de la determinación para cambiar por completo una situación que generaba preocupación y zozobra, sobre todo en las familias de los internos”, expresó el Zar de la Seguridad deltana, comisario Noel Valderrama.
“Había zonas prohibidas en el penal, desde las que se ejercía un control total sobre la masa carcelaria; cotos cerrados utilizados para imponer formas de opresión y tiranía más parecidas al terror que al supuesto orden que decían ejercer”, indicó Valderrama, secretario de Seguridad Ciudadana del e