Álamo, Ver . En Aguacate de Vinazco, la furia de las lluvias y la crecida de los ríos no respetó ni a los muertos. Y es que en esta comunidad del municipio veracruzano de Álamo, la fuerza de las inundaciones de la semana pasada fue tal, que incluso desenterró algunos cuerpos del panteón, y los arrojó a grandes distancias de donde reposaban.
Este martes, gracias a la intervención de las localidades vecinas, fue posible encontrar uno de los cadáveres, todavía dentro de su ataúd, el cual había sido arrastrado fuera de la tumba, y terminó por los rumbos del pueblo de La Soledad, a unos 15 o 20 kilómetros de distancia.
Alfredo Domínguez
Aunque el cuerpo pudo ser devuelto a sus deudos, la operación se volvió especialmente dificultosa por el hecho de que las fuertes corrientes del río Vinazco