Fotos: Eduardo Jiménez
Han pasado cinco días desde que la pertinaz lluvia azotó gran parte del estado de Hidalgo y las afectaciones siguen emergiendo con la misma lentitud con la que avanza la limpieza de las vialidades.
Los caminos que conectan a las cabeceras municipales comienzan a despejarse, pero en cada tramo se revela la magnitud de un desastre que aún mantiene incomunicadas a decenas de comunidades.
Durante un recorrido de Excélsior desde Metztitlán hacia Xochicoatlán, lo que normalmente toma poco más de dos horas para recorrer 21 kilómetros, hoy se convierte en una travesía de más de cuatro.
Deslaves, fracturas en la cinta asfáltica y zonas reducidas a un solo carril hacen que el trayecto sea un constante embotellamiento de maquinaria pesada, vehículos de emergencia y vo