La recesión avanza. Durante el octavo mes del año, la utilización de la capacidad instalada en la industria se ubicó en el 59,4%, un nivel inferior al registrado en el mismo período del año pasado (61,2%). El efecto de la apertura indiscriminada de las importaciones golpeó de lleno en la industria textil, la fabricación de neumáticos e incluso tiró para abajo la producción nacional de automóviles.
Como correlato de este proceso de industricidio – que se da en medio de una volatilidad de mercado financiada por el Tesoro norteamericano-, el empleo no repunta. Según la consultora Vectorial, desde el inicio de la gestión Milei se perdieron 205.456 puestos de trabajo registrados.
La caída en la utilización de la capacidad instalada durante agosto se vincula con el derrumbe del 4,4% en la