La inseguridad ciudadana no solo ha significado el factor determinante en la caída del régimen de Dina Boluarte, sino también será el mayor desafío del Gobierno de transición del presidente de la República interino, José Jerí Oré.

En esa línea, las primeras acciones del nuevo mandatario -supervisión de requisa en los penales y reunión con autoridades locales de Lima y el Callao para coordinar acciones contra el crimen organizado -, están marcando las prioridades del Gobierno de transición.

El último martes por la noche, Jerí dio unas breves declaraciones a la prensa y fue enfático en señalar que la prioridad de su gestión es acabar con este flagelo que socava la integridad del país. Por lo dicho ayer por el ministro del Interior, Vicente Tiburcio, el objetivo es claro y el primer p

See Full Page