
WASHINGTON (AP) — El presidente estadounidense Donald Trump advirtió el jueves a Hamás que “no tendremos más opción que entrar y matarlos” si la violencia interna persiste en Gaza.
La sombría advertencia de Trump se produjo después de que, anteriormente, minimizara la violencia en el territorio desde que un alto el fuego y un acuerdo de rehenes entre Israel y Hamás entraron en vigor la semana pasada en la guerra.
Trump aclaró más tarde que no enviará tropas estadounidenses a Gaza tras lanzar la amenaza contra Hamás.
“No seremos nosotros”, dijo Trump en un diálogo con periodistas. “No tendremos que hacerlo. Hay personas muy cercanas, muy cerca que entrarán y harán el trabajo muy fácilmente, pero bajo nuestros auspicios”.
El mandatario estadounidense dijo el martes que Hamás había eliminado “un par de bandas que eran muy malas” y había matado a varios de sus miembros. “Eso no me molestó mucho, para ser honesto”, señaló.
El presidente republicano no explicó cómo cumpliría su amenaza, publicada en su plataforma Truth Social, y la Casa Blanca no ha respondido hasta ahora a una solicitud de comentarios en busca de claridad.
Pero Trump también dejó claro que tenía poca paciencia para los asesinatos que Hamás cometía contra facciones rivales dentro del devastado territorio.
“Se desarmarán, y si no lo hacen, los desarmaremos, y sucederá rápidamente y quizás violentamente”, indicó Trump.
La policía controlada por Hamás mantuvo un alto grado de seguridad pública luego que los milicianos tomaran el poder en Gaza hace 18 años, al tiempo que reprimían la disidencia. La policía se desvaneció en gran medida en los últimos meses, cuando las fuerzas israelíes se apoderaron de grandes áreas de Gaza y atacaron a las fuerzas de seguridad de Hamás con bombardeos.
Poderosas familias locales y bandas armadas, entre ellas, algunas facciones anti-Hamás respaldadas por Israel, llenaron el vacío. Muchos son acusados de secuestrar ayuda humanitaria y venderla con fines de lucro, contribuyendo a la crisis de hambre en Gaza.
En el plan de alto el fuego presentado por Trump se exigía que todos los rehenes, vivos y muertos, fueran entregados antes de un plazo que expiró el lunes. Pero según el acuerdo, si eso no sucedía, Hamás debía compartir información sobre los rehenes fallecidos e intentar entregarlos lo antes posible.
El primer ministro israelí Benjamin Netanyahu dijo el miércoles que Israel “no hará concesiones” y exigió que Hamás cumpla con los requisitos establecidos en el acuerdo de alto el fuego sobre la devolución de los cadáveres de los rehenes.
El ala armada de Hamás señaló el miércoles en un comunicado que el grupo cumplió con los términos del alto el fuego y entregó los restos de los rehenes a los que tenía acceso.
Estados Unidos anunció la semana pasada que enviaría alrededor de 200 soldados a Israel para apoyar y monitorear el acuerdo de alto el fuego en Gaza como parte de un equipo conformado por naciones socias y organizaciones no gubernamentales. Pero funcionarios estadounidenses han enfatizado que las fuerzas de Estados Unidos no pondrán un pie en Gaza.
Funcionarios israelíes también se han mostrado molestos por el ritmo de la devolución de los restos de los rehenes muertos que el grupo armado había mantenido en cautiverio. Hamás había acordado devolver 28 cuerpos como parte del acuerdo de alto el fuego, además de 20 rehenes vivos, que fueron liberados a principios de esta semana.
La organización ha asegurado a Estados Unidos, a través de intermediarios, que trabaja para devolver a los rehenes muertos, según dos asesores estadounidenses de alto nivel. Los asesores, que no estaban autorizados a comentar públicamente y hablaron con los periodistas bajo condición de anonimato, dijeron que no creen que Hamás haya violado el acuerdo.