Lo que llama la atención es el entorno. El “decorado”. Salas de estar de ensueño. Bibliotecas. Galerías. Cuadros exquisitos. Mimbres, libros, alfombras… y siempre flores . Flores dignas de un cuadro de Van Gogh. Nada desentona. Todo está impecable y cuidadosamente orquestado en colores estivales que invitan a un largo suspiro.
Son los rincones del sagaz Michael Wolff, el terror de las élites y los poderosos de Estados Unidos, a quienes se ha dedicado a despellejar en varias columnas y libros.
Wolff ejecuta sus críticas desde el jardín, el living o la cocina de su distinguido hogar en The Hamptons . Se acomoda frente a la cámara y explica, con un inglés cristalino, la realidad de la política estadounidense con la letalidad de un bisturí. Filma sus columnas idílicas y las sube a Inst