A Mariana Brey no se le hace fácil convivir con un panel que, en líneas generales, tiene pensamientos diametralmente opuestos a los de ella, pero en el fondo parece divertirla la situación.
Al menos eso es lo único que puede entenderse cuando decidió atacar a Pitu Salvatierra poniéndolo al mismo nivel que Karen Reichardt quien había considerado que todo el que no los votara tiene una enfermedad mental.
Pablo Duggan obviamente la paró en seco no solo para defender a su compañero desmintiendo a Brey sino también para aclarar que si Pitu no estaba en el estudio en ese momento era porque había fallecido su hermana después de una larga enfermedad. El hecho no hizo que Mariana parara de tirarle tierra, lo que además demuestra su nivel de humanidad.