La concentración de dióxido de carbono (CO2) en la atmósfera alcanzó en 2024 su punto más alto desde que existen registros modernos, marcando un aumento de 3.5 partes por millón (ppm) en un solo año, según el último Boletín de Gases de Efecto Invernadero de la Organización Meteorológica Mundial (OMM). Este incremento, el mayor desde que comenzaron las mediciones en 1957, confirma que las emisiones globales continúan en una trayectoria ascendente que compromete los esfuerzos internacionales por frenar el calentamiento global .
La OMM advirtió que la persistencia de concentraciones récord de CO2 mantendrá las temperaturas del planeta en una escalada prolongada, intensificando fenómenos extremos como sequías, incendios e inundaciones. La organización alertó además que este informe servirá