El Mundial Sub-20 dejó para Colombia una de las historias más inspiradoras del torneo: la reivindicación de Néiser Villarreal , un delantero que transformó su oportunidad en una nueva esperanza, opara su carrera luego de las polémicas por algunos errores fuera de la cancha.
Su potencia, velocidad y frialdad frente al arco rival lo convirtieron en la gran figura del equipo dirigido por César Torres , que se quedó con el tercer lugar tras vencer 1-0 a Francia gracias a un tanto de Óscar Perea . Con cinco goles en el campeonato, dos frente a Sudáfrica y tres ante España, el atacante cafetero firmó una actuación memorable que lo ubicó entre los máximos anotadores del certamen.
Villarreal demostró que estaba listo para los grandes escenarios en las fases eliminatorias. En el duelo