Este es un artículo para los amantes de Miami Vice y Los Soprano. De cuando también se intentaban opas hostiles (Banco Bilbao contra Banesto), había mucha guerra sucia y Madrid era un avispero. De cuando se inventaba la televisión de madrugada, con marcianos y pelícanos. Pero no solo para los fans de los años ochenta y noventa. Porque Emilio Rodríguez Menéndez, fallecido hace unos días, fue el tiburón que nadó en todas estas piscinas y mantuvo su reinado en el lado oscuro de la vida hasta anteayer.

Fui espectadora y narradora, como periodista, de sus maniobras extremas como abogado defensor de todo lo indefendible: de mafiosos turcos del narcotráfico de heroína; del Dioni, ladrón y guarda de seguridad; de los policías condenados por hacer desaparecer al Nani..., incluso le echó un cab

See Full Page