Minutos después de la visita de la vicepresidenta Delcy Rodríguez, la Parroquia Nuestra Señora de La Candelaria se convirtió en el corazón espiritual del país. Cientos de feligreses, entre cánticos, oraciones y lágrimas de emoción, se congregaron para celebrar la canonización del doctor José Gregorio Hernández y la Madre Carmen Rendiles, los primeros santos de Venezuela.

Desde tempranas horas de la tarde, el templo —remodelado y embellecido para esta histórica ocasión— ha recibido a devotos de todas las edades que, con rosarios en mano, agradecen por los milagros concedidos y elevan plegarias por la paz y la unión del país.

Un pueblo unido por la fe

La plaza adyacente a la Iglesia se encuentra colmada de fieles que entonan himnos, ondean banderas y visten camisetas con la imagen de los

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