La Carrera Sprint del Gran Premio de Estados Unidos tuvo un comienzo electrizante y accidentado. Apenas se apagaron las luces en el Circuito de las Américas, la acción se desató en los primeros metros con un incidente que involucró a tres protagonistas: Oscar Piastri, Lando Norris y Nico Hülkenberg.

En la salida, los dos pilotos de McLaren intentaron ganar posiciones por fuera, pero un leve contacto con el Haas de Hülkenberg desató el caos. Piastri quedó cruzado en medio de la pista, Norris no pudo evitarlo y ambos autos papaya terminaron dañados de forma irreversible.

El toque también afectó a Fernando Alonso, quien trató de esquivar los restos pero sufrió una rotura en la suspensión que lo obligó a abandonar en los primeros minutos.

La dirección de carrera activó el auto de seguridad

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