Un dato que revisaba en el libro era que el primer gran proyecto educativo en el Perú, el del Partido Civil, de fines del siglo XIX, era contradictorio, porque se quería extender la ciudadanía a la gente, pero se desconocía su lengua y su cultura. Era como un avance a medias.
Claro. Era bien entendible para la lógica del proyecto civilista, que hay que acordarnos que venía acompañada de la idea de insertar al país en la modernidad. Eran finales del siglo XIX y principios del XX. Y la idea era que, si te quedabas fuera de la onda moderna, no ibas a poder avanzar como país. Y para eso la educación era un vehículo importante. Pero no cualquier educación, sino una educación particular que nos orientara hacia eso. Y, entonces, la expansión para crear una patria moderna necesariamente tenía que