Caracas, 19 oct (EFE).- Numerosos venezolanos revivieron este domingo los milagros y favores que, aseguran, les concedió el médico José Gregorio Hernández, el primer santo del país suramericano, en épocas duras de sus vidas, la gran mayoría relacionados con temas de salud.
Movidos por ese agradecimiento, numerosos devotos participaron en una vigilia frente a la Iglesia de La Candelaria -donde reposan los restos mortales del popularmente conocido como el ‘médico de los pobres’.
Una de ellas fue Sugelis Linares, de 50 años, quien dijo a EFE que su hermano había nacido “con una condición” que no le permitía caminar, y a los tres años, su madre lo llevó a la Iglesia de Isnotú (estado Trujillo, oeste), donde nació Hernández.
En la puerta del santuario, prosiguió la devota, su hermano “empezó