Otra vez el árbitro Lucas Comesaña quedó en el ojo de la tormenta. Por falta de garantías, el árbitro suspendió el partido entre Gimnasia de Jujuy y Deportivo Madryn cuando había concluido el primer tiempo y el local ganaba 1 a 0.
Comesaña adujo que fue insultado y amenazado camino al vestuario y ya no volvió a dirigir.
Con el cotejo 0 a 0, el juez ignoró un claro penal a favor de Gimnasia.
Alejandro Quintana había puesto en ventaja a los jujeños, a los 42 minutos.
Tras cartón, Comesaña expulsó a Matías Noble en el local.
No es la primera vez que el colegiado está en el centro de la polémica, con arbitrajes nefastos.
Una vez más el ascenso es manchado.