Estoy segura de que existe en algún lugar. Todos siguen el mismo patrón. Una tras otra, toman las mismas decisiones. Me refiero a un Manual para autócratas. Sirven a una élite de amigos y empresarios afines que no les escatiman adulación, pero hacen ver que apoyan a la clase trabajadora y a las clases medias a las que cada vez es más difícil pagar las facturas: por la inflación, por el coste de la energía, por la financiarización de la vivienda.
Para cohesionar a su potencial electorado, y sacando provecho de las redes sociales, eligen un enemigo común. Primero, los más vulnerables, los inmigrantes. Pasó en Hungría, en Polonia, en Turquía, en Italia, pasa en Estados Unidos. Después, van a por el colectivo LGTBI. Y después van contra las mujeres y el derecho al aborto (Ayuso debe de cono