Su matrimonio duró cinco años y dos elecciones federales, y su divorcio es inminente: los líderes del PRIAN han decidido dejar de competir aliados en las próximas elecciones, conscientes de que su coalición fue contraproducente.
El “relanzamiento” de Acción Nacional, protagonizado por Jorge Romero y la cúpula del blanquiazul, arrojó como nota principal el anuncio del divorcio. Una separación “light”, sin críticas ni reproches.
Ni siquiera hubo una mención directa al PRI, aunque todos sabían a lo que se refería el líder panista cuando anunció que el PAN pone punto final a una era, e inicia otra en la que “no dependerá de ninguna alianza partidista, ni pasada, ni presente, ni futura”.
No expuso Romero los números de los estudios de opinión que ha mandado a hacer su dirigencia en los últi