Hace 51 días, Flavio Briatore plantó la bomba . En aquel momento, sus declaraciones sobre el desempeño de Franco Colapinto como segundo piloto de Alpine hicieron preguntarse a los medios especializados la capacidad del argentino para formar parte de la Fórmula 1 . Se debatía sobre si se trataba de un reto o, en realidad, buscaba una reacción en la pista . Desde entonces pasaron cinco Grandes Premios: Países Bajos, Monza, Azerbaiyán, Singapur y Estados Unidos. Y el pilarense, desde aquel puesto 11 en Zandvoort que fue su mejor carrera en la escudería francesa al quedar a cuatro décimas de la zona de puntos hasta la loca última vuelta en Austin que generó el revuelo con Pierre Gasly , demostró qué es lo que quiere .
Quizá porque en aquellas declaraciones, Briatore tambi