Este lunes comenzó la demolición del ala este de la Casa Blanca para dar paso a la construcción de un nuevo salón de baile valorado en 250 millones de dólares , impulsado por el presidente Donald Trump , como parte de un ambicioso proyecto de remodelación del histórico edificio presidencial.

Imágenes difundidas por el New York Post muestran que las cuadrillas de construcción ya han desmontado la entrada cubierta que durante décadas dio la bienvenida a visitantes y delegaciones oficiales. Las ventanas con vista hacia el Departamento del Tesoro aparecen destrozadas y la antigua oficina de caligrafía presenta un gran agujero en su estructura.

El Ala Este , levantada en 1942, es una de las partes más recientes del complejo presidencial y tradicionalmente ha albergado las oficinas de

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