En 2005, llegó a cines El león, la bruja y el armario , la primera película basada en los libros de fantasía de C.S. Lewis . La historia de Peter, Susan, Edmund y Lucy, los cuatro hermanos que descubren un mundo mágico escondido detrás de un armario, se convirtió en un fenómeno global. Lo que muchos no saben es que la Segunda Guerra Mundial tuvo una influencia clave en el desarrollo de Las Crónicas de Narnia .

La historia de esta saga comienza haciendo referencia al Blitz , la campaña de bombardeos alemanes que sufrió Londres entre 1940 y 1941. Según empieza explicando el primero de los libros, estos ataques obligaron la evacuación de los hermanos Pevensie, quienes fueron enviados a la casa de un profesor en el campo, donde vivieron rodeados de libros y naturaleza.

Este suceso concreto está basado en otro suceso real: la operación Pied Piper, también conocida como la operación Flautista de Hamelín . En septiembre de 1939, dos días antes de que Reino Unido declarara la guerra a la Alemania nazi, el gobierno británico activó esta operación para evacuar cerca de 1,5 millones de personas, entre ellas 800.000 niños. Estos abandonaron ciudades como Londres, Manchester y Birmingham para refugiarse en zonas rurales.

Miles de niños fueron separados de sus familias , y sus experiencias fueron muy diversas: algunos disfrutaron de la vida rural gracias a sus familias de acogida, pero otros sufrieron en hogares donde quedaron totalmente desatendidos. Una de las muchas historias de estos menores es la que Lewis inventó para Peter, Susan, Edmund y Lucy.

Inspiración y hechos reales

Para escribir sobre estos personajes, el escritor se inspiró en los niños evacuados que él mismo recibió en su residencia de Oxford, conocida como The Kilns. Una de las niñas que más lo marcó fue la adolescente June Freud, que sirvió de inspiración directa para crear el personaje de Lucy. No fue hasta décadas después cuando Douglas Gresham, hijastro de Lewis, le contó esta historia a la joven Freud.

La ambientación de la Segunda Guerra Mundial también aparece representada en el sistema que rige Narnia, el mundo de fantasía que se esconde tras el armario. Por ejemplo, el personaje de la Bruja Blanca, que mantiene a Narnia en un invierno sin fin y gobierna con una autoridad absoluta sobre los seres que allí habitan, podría ser un reflejo de los regímenes totalitarios propios de la época del conflicto armado. Según la revista Smithsonian Magazine , el historiador Owen Dudley Edwards llegó a decir que este personaje pudo haberse inspirado en Hitler .

Por otro lado, en Las Crónicas de Narnia , la magia juega un papel fundamental. Este elemento permite que los Pevensie, que se han enfrentado a una situación traumática por la evacuación y la separación de su familia, puedan convertirse en reyes, guerreros y héroes capaces de cambiar la historia de sus vidas. Como si Lewis tuviera claro que, en tiempos de sufrimiento, la imaginación puede llegar a ser una herramienta poderosa.