En los muros de la cárcel quedaron plasmadas las historias del paso de miles de personas durante los cerca de cien años que operó allí el centro carcelario. El creador del cortometraje, Diego Samper, explicó que “Más que un documento sobre la prisión, el trabajo fue coger estas imágenes y darles vida. De ahí surge esta película animada que refleja cómo podían ser las noches de los prisioneros y eso fue lo que traté de reconstruir, era poder recrearse en la mente de alguien”.

El Panóptico como centro cultural fue abierto al público después de veinte años de tropiezos, malos manejos y falta de recursos para habilitarlo. Ahora, ya está en pleno funcionamiento, y colectivos de jóvenes artistas se han apropiado del escenario; además se ha convertido en un lugar de encuentro y la Alcaldía desar

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