En los primeros nueve meses de la administración Trump, más de 170 ciudadanos estadounidenses han sido detenidos contra su voluntad por agentes de inmigración, según reveló una exhaustiva investigación de ProPublica.

Redacción LTH

Las detenciones, caracterizadas por su brutalidad y duración, afectan de manera desproporcionada a la comunidad hispana, exponiendo un patrón sistemático de perfilamiento racial, con la anuencia de la Corte Suprema de EE.UU., que autorizó recientemente a los agentes en Los Ángeles a considerar la raza durante las operaciones de inmigración.

El juez Brett Kavanaugh ofreció garantías al público: Si los oficiales descubren que una persona detenida es ciudadana o está legalmente en el país, debe ser liberada de inmediato. Sin embargo, la realidad documentada contr

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