El 13 de mayo de 1993, una imagen catapultaba a Nicolás Sarkozy como el héroe del momento : llevaba en brazos a un niño sobreviviente de una toma de rehenes en una escuela de la ciudad de Neuilly Sur Seine, donde fue alcalde por casi 20 años. Muchos le criticaron por ejercer el llamado “oportunismo mediático” pero -queriendo o no- le funcionó: fue el impulso perfecto para un político que, a pesar de sus escasos 33 años, tenía ya aspiraciones presidenciales .
nació en París el 28 de enero de 1955 y proviene de raíces mixtas: húngaras por parte de padre, y griegas-judías y francesas por parte de madre. Una mezcla rara que, al principio, no calaba en las esferas de la élite social francesa. El joven Nicolás pudo remontar la cuesta con educación: se recibió de abogado en la Facultad de De