Los amables lectores de La Región que todos los martes se entretienen leyendo estas historias de viejo periodista que les cuento, saben que de vez en cuando me gusta evocar episodios de ese Ourense lejano y entrañable en el que tuve la suerte de participar, ya fuera en la radio local, las historias
Aquellas reuniones sentimentales de los actos del “Valle Inclán”

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