El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro Moros, dirigió un emotivo mensaje a la nación, en el que reafirmó su identidad como líder del pueblo trabajador. En su discurso, Maduro se presentó como "el presidente pueblo, tu presidente obrero", subrayando que su formación política y humana proviene de las asambleas obreras y del contacto directo con la gente humilde. El mandatario hizo un llamado a la población para no olvidar las raíces populares que han forjado el proyecto político que lidera. "No olvidemos nuestras raíces para no perder la esencia y la conciencia de lo que somos", afirmó. Maduro destacó la importancia de la lucha por la justicia, la independencia y la igualdad del pueblo venezolano. "Nosotros somos fuertes haciendo Revolución, combatiendo a los enemigos de la Patria", expresó, enfatizando la necesidad de fortalecer la identidad y unidad del movimiento obrero en el país. El mensaje de Maduro busca inspirar a la clase trabajadora y reafirmar su compromiso con los derechos de la clase obrera, concluyendo con un fervoroso: "¡Que viva la Clase Obrera de Venezuela!". Este discurso se enmarca en un contexto de búsqueda de unidad y fortaleza entre los trabajadores venezolanos, en medio de desafíos sociales y económicos.