El ambicioso plan para revertir el flujo del Gasoducto Norte —clave para llevar el gas de Vaca Muerta hacia el Noroeste argentino— se encuentra virtualmente paralizado.
La contratista Esuco S.A., adjudicataria de las obras en las plantas compresoras de Lumbreras (Salta), Lavalle (Santiago del Estero), Deán Funes y Ferreyra (Córdoba), anunció que no continuará los trabajos por falta de pago de ENARSA, dejando en suspenso un proyecto que el propio Gobierno nacional había presentado como emblema de la nueva “eficiencia estatal”.
La advertencia de la contratista y el freno de la obra
Según información que publica La Política On Line, la empresa Esuco, propiedad de la familia Wagner, envió a ENARSA un comunicado contundente: “Sin plata, no seguimos”. En la carta, la firma argumenta que prome

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