El pleno municipal de octubre pintaba tranquilo, marcado acaso por el aniversario de la dana , hasta que ha llegado Vox en el tiempo de descuento para marcar perfil propio y, de paso, tensar al límite el pacto de gobierno con María José Catalá . Hasta ayer, los de Gosálbez solo se habían opuesto tímidamente a la Zona de Bajas Emisiones de València –exigida por el Ministerio de Transportes y Transición Sostenible para las ciudades de más de 50.000 habitantes– cuando se empezó a hablar de ella y cuando al frente del grupo municipal estaba aupado Juan Manuel Badenas , ahora en un muy discreto segundo plano. Pero en el trámite definitivo con su paso por el pleno tras la modificación del Plan de Movilidad Urbana los voxistas tumbaron las limitaciones a los coches contaminantes ant

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