El equipo visitante, los Baltimore Ravens , llegó con una racha de tres victorias consecutivas y la intención de consolidar su posición en la tabla de la AFC Norte. El entrenador de Baltimore, con la mirada puesta en la meta de alcanzar la postemporada , sembró confianza en sus jugadores, especialmente en su mariscal de campo de origen de Annapolis, quien estaba a punto de demostrar que el dolor de su tendón de la pantorrilla no había dejado rastro.

Con la presencia de un equipo que había sufrido una lesión en la pierna derecha, la presión sobre el quarterback se incrementó. Sin embargo, en su primer inicio desde la semana cuatro, el jugador logró lanzar 204 yardas y cuatro touchdowns. La precisión fue evidente: completó 18 de 23 pases, lo que lo coloca como uno de los más eficiente

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