Eugenio despertó gritando. Su esposa, Rita, lo miraba preocupada. No era el primer amanecer turbulento. En el desayuno, la mujer le dijo al marido:
-Ya van seis veces que me despertás así. Deberías ver al doctor.
Eugenio bebió el primer sorbo de café antes de responder:
-Nos advirtieron. ¿Qué más podrían agregar?
-Una medicación, una terapia -replicó Rita algo molesta-.
A Eugenio lo soliviantaba descubrir que a Rita le fastidiaba más la interrupción de su propio descanso, que lo que pudiera pasarle al marido.
-Podemos dormir en camas separadas -sugirió el hombre-.
-Con esos gritos me despertarías igual - declaró Rita-. Además, transpirás como un surtidor...
Ocho meses atrás, Eugenio había sobrevivido a un accidente aéreo. El avión se había estrellado en Barcelona. En el mismo vuelo

 Clarín Espectáculos
 Clarín Espectáculos

 La Nación Sociedad
 La Nación Sociedad Raw Story
 Raw Story AlterNet
 AlterNet CNN Politics
 CNN Politics RadarOnline
 RadarOnline