La expresión “comida basura” suele evocar la balanza, el colesterol o la digestión, pero un nuevo estudio , ha puesto bajo el foco otro órgano: el cerebro. Científicos de la Universidad Tecnológica de Virginia han clasificado los alimentos ultraprocesados en función de su impacto sobre la cognición y han identificado cuáles resultan más dañinos para nuestra función mental.
El estudio parte de un hecho sencillo, pero alarmante: la dieta ultraprocesada no solo altera metabolismo o peso, también influye en los procesos cognitivos, la memoria y la atención. Los alimentos ricos en grasas saturadas, azúcares añadidos, sal y aditivos provocan inflamación, estrés oxidativo y alteraciones en la comunicación celular del cerebro . Ben Katz, líder del estudio, lo resume en : “Una dieta alta en co

 LA RAZÓN Ciencia
 LA RAZÓN Ciencia

 Las Vegas Review-Journal Politics
 Las Vegas Review-Journal Politics