Mucho cuidado con el Congreso que elijamos en abril próximo, y no me refiero solo a la latente posibilidad de dar un escaño a delincuentes, prontuariados y sinvergüenzas, sean “mochasueldos”, “niños” o hasta violadores, sino también a incendiarios, radicales y antisistemas como los que buscan tener mayoría en ambas cámaras a fin de llevar al país por el abismo del socialismo y las tiranías eternas que además solo generan pobreza y falta de libertades.

Lo señalo porque por estos días en que se van perfilando las candidaturas presidenciales y parlamentarias, solemos poner mayor interés en analizar a quienes aspiran a llegar a Palacio de Gobierno, y eso está muy bien. Sin embargo, no perdamos de vista la conformación del próximo Congreso, que será el lugar donde se definan muchas cosas, incl

See Full Page