Una de las características más penosas -y muchas veces peligrosas- del presidente Javier Milei, es la autopercepción de poder que tiene y, en base a ello, la violencia discursiva que despliega sobre todo aquello que se opone a su pensar. En esa estructura de comportamiento, uno de las acciones que lleva adelante más a menudo, es tuitear y retuitear con desenfreno y durante horas noticias falsas o tergiversadas de las cuentas de trolls libertarios pagados con dinero del Estado.

Y aunque se negó a borrar un tuit en el que se burló de Ian Moche, un niño activista neurodivergente, no hizo lo mismo con un retuit en el que celebró una fake news : un tuit del usuario "gorras del cielo" creó un título con el sello de Clarín en el que aparentaba una invitación de AC/DC para que Milei se suba al e

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