Elegir qué beber antes de dormir puede influir directamente en el control del peso y la calidad del descanso. Diversas investigaciones apuntan a que ciertas bebidas nocturnas favorecen la saciedad, estimulan el metabolismo y mejoran la digestión, mientras que otras pueden aportar calorías vacías que obstaculizan la pérdida de grasa. Por ello, optar por opciones ligeras y nutritivas puede ser una estrategia sencilla para apoyar el adelgazamiento.

Entre las opciones más recomendadas por expertos en nutrición se encuentra el kéfir natural sin azúcar. Esta bebida fermentada es rica en proteínas, principalmente caseína y suero de leche, que ayudan a conservar la masa muscular y prolongar la sensación de saciedad durante el descanso. Además, contiene probióticos que benefician la salud intestin

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