En España viven más de 8.000 apátridas , personas sin una nacionalidad oficialmente reconocida. La mayoría son saharauis , protagonistas de un limbo administrativo y personal que les deja sin país, a pesar de que, en muchos casos, sus padres o abuelos fueran ciudadanos españoles. Esta es la historia de Meimuna , una joven que ha vivido una década en esta situación hasta obtener la nacionalidad, y la de tantos otros que comparten un vínculo histórico con España que choca con una compleja realidad política.

Una década sin país

La historia de Meimuna es la de una vida marcada por la burocracia. Durante diez años ha sido apátrida , una condición que, según relata, le ha supuesto una "tristeza muy gorda". Su familia, como tantas otras, se vio forzada a dividirse tras la Marcha Ve

See Full Page