La primera semana de noviembre no fue una más. El ambiente se mostró inusualmente frío para la época y con lluvias más frecuentes de lo habitual. En la Ciudad de Buenos Aires, cinco de los nueve días del mes ya registraron precipitaciones, aunque la mayoría fueron débiles o de corta duración.

No debería sorprendernos: noviembre es uno de los meses más lluviosos del año en la región pampeana. Lo que sí llamó la atención fue la persistencia del aire frío, que dejó tardes grises y abrigos todavía a mano, cuando lo normal sería estar buscando sombra.

Pero el panorama empezó a revertirse. Este fin de semana marcó un cambio de tendencia, con temperaturas en ascenso y un ambiente que finalmente se acerca a lo que solemos esperar para esta altura del año.

El sábado ya se sintió más templad

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