La congresista de Podemos Perú, Ariana Orué, ha negado de manera contundente las acusaciones de uso indebido de recursos del Estado. Esto surge tras la difusión de un reportaje de Cuarto Poder que la muestra viajando en un vehículo con su coordinador parlamentario, Álex Paredes, rumbo al gimnasio. Orué afirmó: “Han distorsionado la información de que yo utilizo recursos del Congreso. El carro no es del Congreso, a mí no me asignan combustible y hemos estado fuera del horario laboral.”

El reportaje, emitido la noche del 6 de noviembre, mostró imágenes de Orué y Paredes en un viaje matutino. Según la investigación, Paredes, quien tiene un salario de 3.100 soles, esperó a la congresista mientras ella finalizaba su rutina de ejercicios y luego la llevó de regreso a su hogar. Posteriormente, Orué se dirigió al Congreso, llegando fuera del horario previsto para la sesión plenaria.

Al ser consultada sobre el reportaje, Orué inicialmente sostuvo que se traslada de forma independiente para sus actividades personales. Sin embargo, luego admitió que su coordinador la ha trasladado fuera del horario laboral, justificando esta práctica. “Me ha llevado un par de veces fuera del horario laboral. Fuera del horario laboral puede hacer lo que quiere. Si estamos fuera del horario laboral, ¿por qué sería un mal uso de recursos?”, argumentó.

La congresista también denunció que la cobertura mediática ha invadido su privacidad, exponiendo detalles de su vida personal y su hogar. “Yo no soy ninguna delincuente, ninguna corrupta. No sé a qué congresistas les han hecho lo mismo, porque a mí prácticamente me han seguido desde la hora que me levanto hasta la hora que salgo”, expresó.

Además, el reportaje reveló que Orué, tras asumir su curul, contrató a Nicolás Bazurco, socio de su hermana, como asesor parlamentario. Bazurco, quien tiene un salario de 10.000 soles, estuvo involucrado en un incidente relacionado con el consumo de alcohol en 2019. La hermana de Orué, Shirley, se negó a comentar sobre el nombramiento, afirmando que solo la congresista debe brindar información.

La controversia sobre el uso indebido de personal no es un caso aislado. Cuarto Poder también reportó situaciones similares con otras parlamentarias, como Lucinda Vásquez, quien fue acusada de emplear a un trabajador para recibir una pedicura durante el horario laboral.

En octubre de 2024, Orué llegó al Palacio Legislativo con un chaleco antibalas, denunciando amenazas y solicitando mayor protección estatal. La congresista enfatizó que la vigilancia asignada solo cubre su hogar, dejándola expuesta durante sus actividades públicas. Orué concluyó que continuará con su labor de fiscalización en el Callao y pidió respeto por su vida personal.