Frente al aumento de las olas de calor y la creciente demanda de enfriamiento, adoptar soluciones sostenibles -con un fuerte enfoque en técnicas pasivas, sistemas de bajo consumo energético y enfriamiento híbrido que combina ventiladores y aires acondicionados de bajo o nulo consumo- podría reducir las emisiones de gases de efecto invernadero, ahorrar billones de dólares y ampliar el acceso al enfriamiento vital para quienes más la necesitan, según un nuevo informe del Programa de las Naciones Unidas para el Medio Ambiente (Pnuma).

Se prevé que la demanda de enfriamiento se triplique para 2050 , impulsando el cambio climático y sobrecargando las redes eléctricas.

La Ruta de Enfriamiento Sostenible o Sustainable Cooling Pathway podría reducir en un 64 % las emisiones del sector para 20

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