El arquero de River Plate, Franco Armani, se encuentra bien tras la explosión y el incendio ocurridos en la noche del viernes en el parque industrial de Ezeiza. Agradeció el apoyo recibido y confirmó que su familia no estaba en casa durante el siniestro. La explosión, que se produjo en una fábrica cercana, generó una onda expansiva que afectó un radio de hasta cuatro kilómetros, dañando varias viviendas, incluida la de Armani. Aunque su hogar sufrió daños materiales, no hubo heridos en su familia. "Fue una noche compleja", expresó el futbolista en un comunicado. La familia tuvo que autoevacuarse a un hotel debido a la presencia de químicos en el ambiente y el cierre preventivo del barrio. Las autoridades informaron que al menos 20 personas resultaron heridas en la zona, y los afectados fueron trasladados a hospitales locales. La nube de humo tóxica, visible desde varios puntos del sur del conurbano, obligó a evacuar a los vecinos y a desplegar un operativo de emergencia con bomberos y Policía Bonaerense. El incendio alcanzó alturas de hasta 20 metros y se extendió sin control durante la noche. Los bomberos trabajaron arduamente para controlar las llamas y enfriar la zona, mientras se realizaban pericias para determinar el origen de la explosión. Franco Armani, quien fue convocado para el partido de River ante Vélez, se mostró agradecido por la preocupación de la gente y pidió disculpas por no poder responder a todos los mensajes. La situación se mantiene bajo monitoreo, y se espera que las autoridades den más información sobre la normalización del área en las próximas horas.