La última gala de eliminación de MasterChef Celebrity (Telefe) tuvo a Damián Betular como único jurado y protagonista involuntario de un clima cargado de humor y tensión. La noche comenzó con un desafío complejo: replicar una cookie gigante diseñada por él mismo, un reto que exigía precisión y velocidad. Pero que todos los participantes aceptaron como un gran desafío que los llevó al límite.

Ahora bien, como la receta no estaba escrita, Damián Betular debió explicar cada paso en vivo, usando un megáfono para que todos lo escucharan. Entre risas y quejas, fue guiando a los participantes mientras ellos intentaban seguirle el ritmo y controlar la ansiedad típica de una jornada decisiva. Con el tiempo corriendo, la producción intervino y entregó las instrucciones impresas, alivian

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