Uno de los grandes problemas que tiene el país es la alta informalidad empresarial, que afecta, sobre todo, a la mayor parte de las microempresas que funcionan en el país.

De acuerdo con un informe de ANDI, la informalidad empresarial se concentra en micronegocios: el 87,2 % de las empresas con 1 a 5 trabajadores opera informalmente, en contraste con solo 2,4 % en empresas de 51 o más trabajadores.

Considera el centro de pensamiento, que la informalidad empresarial continúa siendo uno de los principales desafíos para la competitividad del país. Este fenómeno no solo limita la capacidad de las firmas para acceder a financiamiento formal, sino que también reduce la base tributaria y afecta la calidad del empleo generado.

A juicio de los analistas, “analizar cómo se distribuye

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