En un mundo sin escrúpulos, hay algunos profesionales que se aprovechan de las víctimas causadas por el pánico y el terror del régimen de Trump contra los inmigrantes.

Redacción LTH

Anabel nunca imaginó que tratar de salvar a su hija le costaría ser estafada con 15,000 dólares y la dejaría hundida en deudas. Todo comenzó cuando agentes de ICE derribaron la puerta de su casa en Charlotte, Carolina del Norte, en febrero pasado. Armados, entraron mientras ella trabajaba pintando apartamentos, revolcaron sus pertenencias y se llevaron detenidas a la madre y a su hija de 20 años, dejando solos a tres menores.

Pesadilla de ocho meses

«Estaba sin trabajo, en los peores momentos, no tenía ayuda, aunque con tal de que liberaran a mi hija eso no importaba», recuerda Anabel, de 40 años, quien pid

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