Como resulta algo lógico y propio de la ley de la vida, las nuevas generaciones traen cambios de costumbres, de gustos, de usos y de pedidos. Y, en este sentido, por más que la tradición sea muy fuerte, la Navidad no es la excepción.

Si bien el espíritu navideño tendría que ver con el nacimiento de Jesús y una celebración cristiana , la realidad es que la tradición de los regalos es muy fuerte y casi no se piensa este día sin sorprender a los otros con un obsequio antes de fin de año.

Por esto, los regalos también reflejan lo que sentimos por el otro y el haber pensado en regalar algo para alguien especial. Sin embargo, en épocas de bolsillos flacos , los reglaos pueden ser un problema. Por suerte, podés sorprender sin necesidad de gastar grandes sumas.

Regalos de Navidad: un mo

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