Acusan a un padre poblano de usar las limosnas de la iglesia para mantener al menos tres novias: la gente ya le puso apodo: “El Mil Amores”

Puebla.- Uay, sobrinos, agárrense porque la historia de hoy trae de todo: fe, traición y harto billete. En la comunidad de Jicolapa, en Zacatlán, un sacerdote, al que ya apodan “Francisco Javier López Flores”, está metido en un tremendo pleito.

Vecinos y feligreses afirman que él no solo quebrantó su voto de celibato, sino que además utilizó las limosnas —esas monedas de esperanza que pasan el platito en misa— para pagar salidas, regalos y amoríos con al menos tres mujeres. Las fotos comprometedoras que circulan en redes lo muestran acompañado de distintas mujeres en situaciones que muchos califican de “más que extrañas” para un hombre de sotana.

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