La Guardia Civil ha desmantelado una infraestructura tecnológica "de gran capacidad" utilizada para el envío masivo de mensajes y llamadas fraudulentas al servicio de grupos especializados en ciberestafas. En el marco de la operación, se llevaron a cabo tres registros en Barcelona, donde los agentes intervinieron abundante material informático y tecnológico valorado en 400.000 euros, según informa el cuerpo en un comunicado este viernes.

La investigación se inició tras varias denuncias presentadas en Alicante por parte de víctimas que recibían llamadas en las que los estafadores se hacían pasar por la Policía Nacional y por el Banco de España, con el fin de presionarles y obtener sus datos bancarios o transferencias de alto importe. Además, algunas de estas llamadas se realizaban en ruso

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